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La riqueza artística y cultural de la capital de la Toscana es impresionante. Todos sus rincones delatan que fue la cuna del Renacimiento, uno de los movimientos culturales más importantes de la humanidad. Para muchos la ciudad más hermosa del mundo.
La cuna del arte y la arquitectura
Empieza tu visita a Florencia desde su corazón: el casco histórico, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. En la plaza más céntrica, la del Duomo, se encuentran la imponente catedral de Santa Maria del Fiore y la cúpula de Brunelleschi, símbolos de la ciudad. Desde allí te recomendamos cruzar el Puente Vecchio saboreando un helado de alguna de las heladerías artesanales que encontrarás de camino. En la Plaza de Michelangelo podrás tomar una foto panorámica digna de postal. Y si te gusta el arte no puedes perderte la Galería de la Academia o la Uffizi, donde se encuentran las obras de los artistas más reconocidos del Renacimiento, como el David de Miguel Ángel o El Nacimiento de Venus.