รีวิวของ Hotel Vielha Val d'Arán Affiliated by Meliá

Calor excesivo en las habitaciones, excesivo es excesivo

Hotel milt bonic i ben situat al centre de Vielha. El personal molt amable i servicial. Hi ha una piscina coberta climatitzada amb un jacuzzi petit. Està bé però l' aigua de la piscina està una mica freda. Esmorzar milt bó. L' habitació molt gran, però el tercer llit, un sofa-llit, molt incòmode. L' entrada de l'hotel es veu deixada, sobta amb l' interior.

Hotel situat al davant del pàrquing central de Vielha, a pocs metres de l hospital. Te pàrquing propi. Recepció perfecte, bones explicacions i check in ràpid. Les habitacions de la quarta planta son molt caloroses i no hi ha opció a control individual de temperatura, massa insoportable. La resta de la habitació está prou bé. L hotel també te una zona amb piscina climatitzada petita però prou valuosa i un hidromassatge. La zona de saunes estava fora de servei. El bar està bastant bé i en especial per relaxar-se hi ha una bona zona a la recepció, grans sofàs i llar de foc.

Sin duda un hotel MUY recomendable por si relación calidad/precio. La atención en recepción fue genial tanto en el check in como el check out y durante la estancia. El desayuno ha sido sin duda MUY completo. La ubicación del hotel es perfecta. Si tengo que poner un punto negativo es a la oferta en el restaurante. Quizá sería interesante disponer de un restaurante con más oferta culinaria para esas ocasiones en las que no quieres salir del hotel y cenar fuera. Por lo demás todo perfecto.

El hotel está muy bien. Llegamos temprano y nos atendió Laia y fue realmente agradable, interesándose por si el viaje hasta allí había sido bueno e indicándonos todos los detalles del hotel, bar, etc......como la habitación no estaba preparada nos ofreció guardarnos las maletas para luego pasar a recogerlas cuando ya pudiésemos entrar en la habitación. Más tarde, cuando ya estaba la habitación lista me llamó a mi teléfono Gloria...también super agradable para indicarme que cuando quisiéramos que ya podíamos ocupar la habitación. Había otra chica (no recuerdo el nombre) con la que interactué en el checkout y que también fue super amable, interesándose por cómo lo habíamos pasado....entre todas nos han demostrado un trato muy cercano y agradable, así da gusto. Las zonas comunes son amplias y están cuidadas. La habitación es bastante amplia aunque las vistas eran hacia la parte de atrás y no eran nada especial. Eso sí, la cama era muy cómoda, el baño amplia. La insonorización de las habitaciones no es muy buena. Una cosa que no me gustó del baño es que no dé al exterior para poder tener una ventana y airearlo mucho mejor y otra fue que la ducha tiene una mampara solo cubriendo la mitad de la entrada a la ducha y claro, eso hace que haya veces que el agua se salga....aunque con poner una toalla en el suelo a la entrada de la ducha se soluciona. Y otro inconveniente en la habitación fue la televisión, o la señal de los canales, mejor dicho. Había canales que no se veían y de los que sí se veían, a veces fallaba la señal, haciendo verdaderos malabares para intentar mejorarlo. Puedo entender que entre montañas no tenga la mejor calidad pero quiero pensar que puede haber solución. Teníamos alojamiento y desayuno y esto, el desayuno, ha sido lo mejor de la estancia. El desayuno es lo mejor del hotel...habíamos ido hace unos años únicamente a desayunar sin estar alojados y han cambiado ligeramente, pero sigue siendo espectacular....hay casi de todo: tés, cafés, colacao, nesquik, zumos (naranja, piña y melocotón), varias leches (semi, entera, avena, soja,...), bollería variada (donuts, minidonuts, napolitanas, magdalenas, galletas de diferentes tipos, pan de molde, barras de pan (para que cada uno se corte el trozo que quiera), aceite, tomate, embutidos de la zona (el trozo entero, para ir cortándolo según se quiera), quesos, muchas frutas variadas (incluyendo gajos de mandarinas pelados en su jugo,...), frutos secos, y unas zonas de comida caliente como bacon, choricitos, verduras asadas, tortilla de patata, gofres, huevos revueltos, y otra zona de frio con embutidos y quesos y también yogures variados. También tenían un reducido surtido de productos sin gluten y sin azúcar aunque pensando en esas personas que necesitaran el consumo de dichos productos, tampoco tenían mucho donde escoger, ya que sólo disponían de 2 o 3 cosas de cada. El domingo (el sábado no lo vimos) había un cocinero en una de las zonas haciendo tortillas en el momento con diversos ingredientes. El sitio del desayuno es amplio y no vi que faltase nunca de nada....si que veía a los cocineros salir para ver si faltaba algo y así reponerlo. Todo muy bien....un desayuno estupendo para coger muchas fuerzas.